El año llegó y no sé qué decir.
Se vaciaron muchas bolsas
y nos cargamos de instrumentos
nuevos, integrados y sensibles.
Sé que por dentro somos diferentes,
sé que debemos atrevernos a utilizar
nuestras nuevas facetas y prestaciones,
y a confiar por encima de todo
en nuestro potencial.
Sé que el nuevo año no es tan sólo
un paso; es un paso gigante.
Y sé que el cambio lleva
a la transformación total.
Adelante,
no dejéis que la rutina envuelva
vuestra frescura en memoria decapitada,
no dejéis que os agarren de los pies
para no saltar,
no dejéis que la repetición de lo antiguo
se convierta en un vicio insoportable.
Adelante,
mañana volvemos a la guerra
pero nosotros ya somos distintos,
y sabemos que a partir de hoy
sólo seremos aquellos
que deseemos ser.
Adelante,
hoy sólo queda caminar,
caminar de raíz.