Discerní el abismo
De la tierra sólida
Y descubrí que el estatismo
Nos persigue
Hasta que nos lanzamos
A la vida que se esconde
En lo oscuro.
Discerní la realidad muerta
De la verdad innata
Y volví a soñar
Con el cuerpo de las lombrices
Que tejen sus alas
Entre las paredes
De las hojas de lechuga.
Discerní lo sórdido
De lo cotidiano
Y lloré por haber olvidado
La débil línea que separa
Lo vivo de los restos,
De lo deshuesado,
De lo funesto.
Me subí a una rama
E intenté alcanzar
Lo que no se podía narrar
Ni argumentar
Ni dibujar
Ni cantar
O apenas conjugar.
Sugerí algunas cosas
A las hojas que me encontré
Cerca del cielo
Y escuché que me pedían
Que volviera a descender
Si anhelaba ver mejor
Las estrellas.
Me tumbé sobre la hierba
Me comí un par de pétalos
Dos hormigas y un caracol
Vomité y seguí contemplando
La luna que insistía en permanecer
De levante a partes iguales
En el día y en la noche.
Me levanté y asumí
El estiércol anidado en mis zapatos
Asumí los cordones demasiado largos
Me deshice de todos ellos
Y volví a sentir la humedad dormida
Bajo la planta de mis pies,
Los colores ocultos bajo la tierra.
*7 de 7, porque aquí se encuentran 7 estrofas de 7 versos,
y porque hoy es 07 del 04 del 12 (4+1+2=7), es decir, 7 de 7.