lunes, 28 de febrero de 2011

The first meeting

The first meeting
In an empty side
The first meeting
Drowning the other side
The first meeting
Then you broke my dreams
The first meeting
While I stole your feet
The first meeting
You said just my name
The first meeting
I was thinking “I'm afraid”
The first meeting
I just said “mhm”
The first meeting
Maybe you was great
The first meeting
You was tall and thin
The first meeting
You relaxed myself
—like a balm—
The first meeting
Did you comprehend my eyes?
The first meeting
Did you recognize me, at the time?
Did you meet me, at the end?
Did you repose in me, at last?

miércoles, 23 de febrero de 2011

La estela de las rimas

En el aire,
las ardillas
son liendres
del alcohol.

En el árbol,
las lombrices
son luciérnagas
del sol.

En la sombra,
golondrinas,
tienden larvas
en los pies.

Por si acaso,
mariposas,
crecen rápido,
más que ayer.

Mientras tejen,
las arañas,
voy y vengo,
tomo un tren.

viernes, 18 de febrero de 2011

Por dentro y por fuera

Si tengo manos,
o no tengo manos,
no lo sé.
Si tengo piernas,
o no tengo piernas,
no lo sé.
Sólo sé,
que de vez en cuando,
pesan.
Si tengo ojos,
o no tengo ojos,
no lo sé.
Si tengo orejas,
o no tengo orejas,
no lo sé.
Sólo sé,
que de vez en cuando,
duelen.
Si tengo brazos,
o no tengo brazos,
no lo sé.
Si tengo dientes,
o no tengo dientes,
no lo sé.
Sólo sé,
que de vez en cuando,
cansan.
Si tengo estómago,
o no tengo estómago,
no lo sé.
Si tengo piel,
o no tengo piel,
no lo sé.
Sólo sé,
que de vez en cuando,
arde.
Por dentro y por fuera.
Si tengo cuerpo,
o no tengo cuerpo,
no lo sé.
Si tengo nombre,
o no tengo nombre,
no lo sé.
Sólo sé,
que de vez en cuando,
hablo.
Por dentro y por fuera.

miércoles, 9 de febrero de 2011

La que se queda

Soy yo
la que me voy
cuando me quedo sola.

Y las imágenes
no corren
si no se las lleva el agua.

Hay ciertos lugares
que requieren
calma.

Hay ciertos sonidos
que transmiten
la luz.

Soy yo
la que me voy
cuando me quedo sola.

Aunque soñemos
que los demás
siguen estando dentro.

En realidad son ramas
de un mismo
sedal.

En realidad nosotros
estamos más aquí
que ellos.

En realidad los ojos
son tan solo
un canal.

Soy yo
la que me voy
cuando me quedo sola.

Porque ellos tejen,
porque son
cientos.

No hay estatuas
que no recuerden
la sal.

No hay caminos
que no hayamos
recorrido antes.

No existe ningún nombre
que no hayamos
oído de antemano.

Las palabrejas son
tan simples que no podrían
quedarse en eso.

Si pienso,
soy yo
la que se queda
cuando me siento a escribir.