viernes, 24 de febrero de 2012

Mareas y bebidas con gas

Y cómo.
No pedir nada más de lo “pedible”.
No “pedigüeñar” lo que se ama a sorbos.
No turbarse el ánimo cuando la bebida se escapa,
rebosa continentes y huye de los márgenes,
explota, grita y golpea las paredes,
se dispone a ser otra,
se dispone a convertirse en toxicidad,
se dispone a repetir alcantarillas,
a encontrar seres subterráneos
y dorados, a mermar,
sólo después de la catástrofe,
a arrodillarse,
sólo después de haber cedido,
sólo después de haber robado el alma
y la piel del lobo a la luna,
sólo después de haber
olido la profundidad,
lamido la tierra,
mordido los huesos
y rebañado las esquinas calcáreas,
después de haber vomitado el deber.
Y cómo no.
Cómo no entregarnos como esclavos.
Cómo no caer a cuatro patas.
Cómo no dejarnos tragar por el agua.
Y cómo.
No desear resucitar.

martes, 21 de febrero de 2012

Desagües en la sangre

Me dijeron que el silencio
se iría por el desagüe.
Que en el centro del mundo
siempre es de noche.
Que por dentro estamos
hechos de oscuridad.
Me dijeron que todo
lo que no vemos
puede mordernos
igual de fuerte
en el estómago,
en cualquier momento,
en cualquier ciudad.
Nuestro fuero interno
es un desconocido veloz.
Y la pátina social
es un insulto
para los que corren.
Me dormiría si pudiera
quedarme para siempre
dentro de esta intensidad
informe y deshuesada.
Me dijeron que el silencio
sólo era una parte de mí.
Me dijeron que vinimos
de este agujero negro,
y que no cesaríamos de volver
de devolver, de volver a él.
Y traté de sacarlo todo afuera,
traté de arrojar silencio
sobre la oscuridad informe,
traté de poner notas a la carne,
traté de escupir fuerte para ver,
traté de arrancar rápido para señalar,
traté de girar la piel para poder sentir
lo rutinario y lo amorfo y lo apelmazado,
traté de extraer y de libar la sangre,
traté de vaciarme por entero
una y otra vez de nuevo,
entré en mi vacuidad
y me di cuenta
de que se había vuelto a llenar.

jueves, 9 de febrero de 2012

¿Sueñan los androides?












El equipo de Suxinsu me ha vuelto a pedir otro featuring.
Ésta vez mi cabeza se ha ido en busca del misterio del unicornio de papel, de la empatía noctámbula de los Nexus-6 y de los sueños que se encuentran bajo el dominio de las ovejas eléctricas. Querid@s, mi interpretación de Blade Runner se llama: ¿Sueñan los androides?
Os dejo un pedazo de aquello que me encontré por el camino de navegación, y la entrevista que me hicieron esta semana los chicos de Suxinsu.
http://www.suxinsu.com/blogs/news/5542422-suenan-los-androides
Que la fuerza os acompañe, y que lo que veais a través de vuestros ojos sea más que un dentro y un fuera, para que nunca más vuelva a tener límites. Open The Eye.

AAW

miércoles, 1 de febrero de 2012

Huecos, huesos, frenesí y esta urna de cristal

A veces
Algo nos dice
Que hay un hueco
Dentro de nosotros
Muy difícil de saciar.
Un hueco arremolinado
Que no se marcha,
Y que a veces,
Más que un hueco,
Parece una mancha.
Nos busca y nos persigue
Y nos encuentra
Y luego nos obliga
A traerle aquello
Que necesita tragar,
Algunas cosas simples
Y otras tan complicadas
De cazar como un rabo de burro,
Un diente de conejo,
Leche de cabra montesa,
Corazón de diablo
O miembros de un toro senil.
A veces nos lo pone tan difícil
Que no sabemos cómo decirle
¿Para qué?, ¡Márchate de aquí!
Tu mancha y tú dejadme
Vivir en paz,
Sin deseos,
Sin hambre,
Sin ganas de matar a un buey
Por navidad,
Sin necesidad,
Sin locura hueca,
Sin fiebre ni frenesí,
Dejadme marchar
A mí,
Fuera de aquí,
Echadme de vuestras cadenas
De esclava de este cuerpo,
Largad vuestros huesos
Y tendedme aquí,
Tranquila,
Bajo esta urna de cristal.